Después de Asturias volvimos a Madrid, aquí descansamos 2 días y luego comenzamos a trabajar en el “Verano de Misiones” de JuCUM, fue un tiempo increíble de crecimiento, trabajo en equipo, compartir de Jesús y conocer gente muy especial y maravillosa. El campamento duro 17 días empezó el domingo 10 de julio y toda la primera semana se realizaban clases y enseñanzas durante la mañana y trabajo práctico y talleres de circo y teatro por la tarde entre otras actividades, de esto estaba a cargo el Grupo Oxigenio (Oxigeno en español) de Brasil de la iglesia presbiteriana, ellos son un ministerio muy bueno y con mucha gracia de Dios, los chicos de nuestro equipo también participaron de estos talleres y pudimos participar de las clases de los últimos 2 días, donde conocimos a un joven que está siendo muy usado por el Señor aquí en España sobre todo con los Jóvenes, él se llama Itiel Arroyo, este es el blog de su ministerio: http://itielarroyo.ning.com/, fue de mucha bendición y creo que vale la pena promoverlo.
Mientras los participantes del campamento estaban en clases nosotros hacíamos intercesión en los lugares donde después haríamos los evangelismos, ayudamos a la repartición de alimentos para gente necesitada en una iglesia del sector en donde viene gente de todo tipo entre ellos musulmanas y africanas, en esta iglesia hemos hecho este trabajo 3 veces, se da alimento a más de 200 familias por día de repartición y antes de entregar los alimentos se hace una reunión parecida a un culto pero la mayoría de la gente no es cristiana (como ya dije hay de todo), es muy bueno y diferente, creo que esto rompió también algunos de mis esquemas (yo que me creo de mente amplia), nunca pensé encontrarme dentro de una iglesia sobre todo con mujeres musulmanas que están tapadas de la cabeza a los pies, realmente no sabía cómo reaccionar, debo ser sincero, no sabía si hablarles ni como saludarlas, luego me di cuenta de que no era tan difícil como yo pensaba incluso estuvimos bromeando con una de ellas que era muy maldadosa, realmente fue muy bueno y amplió mi visión y creo que la de los chicos también, además de esto ayudábamos a preparar la merienda y la cena de todo el verano de misiones que éramos más de 50 personas, también estuvimos en KM. 0, es una plaza del centro de Madrid y aquí se realiza un evangelismo masivo, es muy conocido en España incluso ha salido en televisión, en este lugar también vimos una gran diversidad cultural ya que es una parada turística de Madrid, el día viernes fuimos a hacer evangelismo con los participantes a un Parque de Torrejón de Ardoz (Parque del Ocio) y el equipo de Brasil se fue a otro parque (Parque Europa), el sábado por la noche visitamos una iglesia que está empezando, era un poco diferente ya que la mayoría de la gente no era cristiana y se trataba de no atosigar a nadie, entonces nos pidieron que no usáramos un lenguaje muy evangélico y adivinen que… nos costó un mundo, me di cuenta al tratar de no usar este vocabulario que lo usamos más de lo que uno cree, es increíble la cantidad de palabras evangélicas que usamos sin darnos cuenta, aunque esto no es un gran problema muchas veces en el mundo evangélico juzgan nuestra “espiritualidad” por la forma en que hablamos y nuestro llamado no es a marcar la diferencia con nuestro vocabulario sino con nuestras acciones, aunque me da lo mismo hablar de una u otra forma, si entiendo que por lo menos debemos explayarnos y comunicarnos bien, y lamentablemente el lenguaje evangélico causa rechazo en mucha gente, quien sabe lo que es concupiscencia, incluso dentro de la iglesia se desconoce y algunos piensan que somos raros o medios vampiros al pedir a Jesús que nos cubra con su sangre (que quede claro que la sangre de Jesús es de mucho valor para mi vida, solo me pongo en el lugar de alguien que no es cristiano), en fin me di cuenta de eso, imagínense estando en un lugar donde si descubren que eres cristiano puedes ir a prisión o incluso perder tu vida y estas tan acostumbrado a un vocabulario religioso, tal vez es un poco extremo pero quien sabe, yo mismo más de una vez le dije amen a un profesor cuando pregunto si entendíamos la materia, jejeje.
Bueno, siguiendo con el tema, el día domingo visitamos una cárcel, y Dios también uso nuestras vidas aquí, cabe destacar que el poder entrar a la cárcel no fue como en chile que las veces que fui me revisaron entero, aquí no, habían cámaras por todos lados y muchas puertas electrónicas, además de ser un lugar cómodo (dentro de todo), la verdad que parecía hotel, el trabajo fue muy lindo, habían como 150 presos, pero lo inédito paso al terminar la reunión que hicimos, se acercó un joven muy contento y nos dijo: ¡yo también soy Chileno!, imagínense no sabía si alegrarme o darme vergüenza, casi le digo que bueno encontrarte aquí, y lo mejor aún no venía después de él pasaron a saludarnos como 5 o 6 presos más y adivinen que, 3 de ellos eran Chilenos, me acorde del video del lanza internacional, lo bueno es que el Señor nos respaldó en todo lo que hicimos y muchos de ellos recibieron al Señor en sus vidas alrededor de 50, espero que por lo menos el 10% de ellos continúe. El día lunes tuvimos libre y fuimos a conocer Madrid (¡por fin!), estuvo muy bueno, conocimos la plaza mayor, el palacio real y la catedral de Almodena, entre otras cosas. Luego de esto el día martes 19 de Julio nos fuimos al sur de España con el verano de misiones que comenzaba su parte práctica, estuvimos trabajando en 4 ciudades distintas entre las cuales estaba Lorca, la ciudad donde fue el terremoto el pasado 11 de Mayo, pudimos interceder por la ciudad y además de esto nuestro trabajo fue de impactos evangelísticos en diferentes plazas, con dramas, bailes, stomp, fuego, malabares, acrobacias etc., también regalamos bebidas en las ferias y estuvimos en un canal de televisión y radio cristianos que tiene señal hasta África, estuvimos en dos cultos muy buenos donde Dios se movió de una forma especial, fue un muy buen trabajo de equipo junto al ministerio de Brasil y los Jucumeros de Madrid (los organizadores) y también Jucumeros de la base de Cáceres, en resumen en este campamento más de 4.000 personas oyeron el mensaje del evangelio y alrededor de 80 personas recibieron a Cristo en su corazón, además aprendimos nuevas obras de teatro y conocimos el otro extremo de España el mar mediterráneo. Como punto aparte, ya he podido nadar en el Pacífico, el atlántico, el Cantábrico y el Mediterráneo, (que se sufre en las misiones, jejeje). También le damos gracias a Dios por su cuidado ya que en el sur hace mucho calor con temperaturas sobre los 40 grados y como estamos al lado de África es muy seco, el Señor nos permitió estar en un lugar donde teníamos una piscina así que estábamos metidos en el agua cada vez que podíamos aunque a veces hacia más calor en el agua que afuera de ella, mis hijos disfrutaron muchísimo y obviamente nosotros también, fue un regaloneo de Dios, el verano de misiones terminó el día 27, ese día regresamos a Madrid, son como 6 horas de viaje (en realidad son menos pero nuestro conductor no era muy amigo de la velocidad), aunque el venir lento nos salvó de tener que tal vez lamentar una tragedia ya que, se le cayeron 7 de los 10 pernos de las ruedas traseras y casi se salen las dos ruedas del lado derecho, así que nos salvamos de esta y solo tuvimos que esperar 7 horas y media en una estación de gasolina hasta que repararan el bus.
En estos momentos estamos en Madrid, el Señor permitió que en este tiempo pudiéramos quedarnos aquí en la base y ser de bendición en algunos trabajos prácticos que había que realizar como cortar pasto, sacar malezas y pintar el frontis de la base además trabajamos en evangelismo con una iglesia por las noches, mañana viernes vamos a un mall a gastar los últimos euros que nos van quedando en comprar recuerdos y aprovechar las sobre rebajas de las tiendas de marca que en chile son carísimas, como por ejemplo zara, se pueden encontrar poleras desde 3 euros ($ 2.100 pesos chilenos), y el sábado comenzamos nuestra última etapa en Cáceres provincia de Extremadura.
Estamos muy ansiosos por lo que viene en esta última semana antes de volver a nuestro amado Chile…
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